domingo, 9 de abril de 2017

Luciendo a mi chica


Existen diferentes opiniones acerca de cómo debe ser la relación en público con tu pareja, en mi caso, a mi me gusta lucir a mi chica, ahora te lo explico.
Hace años, en mis años de juventud, solia salir con mi novia, la cual le quedaban muy bien los jeans, que hacían ver su trasero bastante apetecible. Eso me encantaba, pues me gustaba su figura y me hacía ver como un afortunado a su lado.

Ahora, años despues, mi mente sigue recordando esos momentos inolvidables, pero a la vez, ahora vivo otro tipo de aventuras. He tenido la oportunidad de salir con chicas mas jovenes que yo, y la verdad me encanta, soy un enamorado (por no decir pervertido) de andar en la calle o en restaurantes o bares y que mis acompañantes luzcan su cuerpo.


Tuve una amiga hace unos diez años, a la cual le gustaba lucir sus piernas, la verdad, eran mi perdición. Ella lo sabía y se ponía unos shorts pequeños que podian emocionar a cualquiera, en mi caso, a mi me volvía loco. 

Me encantaba ir en mi carro, llevarla conmigo y acariciar sus deliciosas piernas durante el camino, a ella le gustaba, se le veía en sus ojos cuando me miraba, con esa mirada de deseo, y de mi parte no podía dejar de acariciarle, a veces más allá de donde debería hacerlo, pero ella se dejaba, era un recorrido muy emocionante.

Con ella, solíamos salir a la playa, había un restaurante a la orilla del mar y cuando cenabamos y tomabamos alguna bebida, pues yo gozaba tocandole la pierna, acariciandosela y me gustaba ver cómo otros tipos le echaban el ojo a ella, era excitante, era algo que me gustaba vivir, por el hecho de sentirme el mas orgulloso hombre del lugar.

Tuve otra amiga, ella era sexy en todo sentido, era agradable, inteligente, pero tenía una forma de vivir su pasión de manera emocionante y te contagiaba en todo momento. ¿Mi perdición con ella?, nuevamente las piernas, solo que esta chica las lucía con minifaldas, wow, ella era divina en todo sentido.

A veces se ponía un vestido corto color rosado que le tallaba de forma genial, y sus piernas lucían fenomenal, era un sueño hecho realidad. Con esta chica, acudimos a un restaurante-bar, era de noche, y las miradas iban hacia ella, eso me excitaba, tanto asi, que un mesero no paraba de admirarla, y hasta se puso nervioso cuando nos tomaba la orden. Esa noche la recuerdo como si hubiera sido ayer, terminamos haciendolo en la noche, fue delirantemente genial.

Conforme vas teniendo aventuras, conoces mujeres, lugares, formas de vestir, todo pensamiento termina en la palabra "sexo", toda mi mente se conjugaba para llegar a ese momento exquisito de la noche, lograr que tu chica se fuera contigo y tener una noche de pasión. Mas adelante recordare muchos pasajes de mi juventud y de ahora que seguramente comentaremos en este blog, solo que serán historias y opiniones mucho más explícitas.


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